La cervecera Oettinger en Alemania monitoriza en continuo sus aguas residuales industriales con s::can

Antecedentes

Con una producción total de 245,7 millones de galones al año, el grupo Oettinger es una de las empresas cerveceras más grandes de Alemania. Cada año, aproximadamente 2 billones de botellas y latas son llenadas de cerveza, cerveza mezclada y refrescos. Este negocio familiar fue fundado en 1731 y su sede central está en Oettingen, donde trabajan 1.050 empleados. Se producen aproximadamente 92,5 millones de galones de cerveza y otras bebidas cada año en la fábrica. Esto la convierte en una de las cerveceras más importantes de Alemania. El agua residual, generada por la fabricación de la cerveza y la limpieza de las botellas, es tratada en la propia planta de tratamiento de aguas residuales

El diagrama muestra las concentraciones de DQO y NO3-N de una semana. El 25 de noviembre hubo una alarma por evento.

Reto

Al crecer la producción, también se acumuló más cantidad de agua residual. Por ello, en 1992 se construyó una EDAR para liberar la planta municipal. Desde 1992 hasta 2009, el agua residual a tratar aumentó de 1200 m3/d a 2700 m3/d, que corresponde más o menos a 30000/99000 habitantes equivalentes. Además, el límite máximo permitido de DQO disminuyó de 120 mg/l a <60 mg/l. Para poder cumplir con las cantidades máximas y para poder descargar el agua residual tratada directamente al río, la cervecera tuvo que instalar un sistema de monitorización en continuo en el efluente de la planta.

La solución s::can

La única solución que tenían para controlar el agua residual tratada durante un período largo de tiempo era el envío diario de muestras a un laboratorio acreditado. En el 2004, la cervecera Oettinger optó por un sistema más sostenible. Se instaló un sistema de monitorización a tiempo real con una sonda spectro::lyser de s::can, lo que les permite reaccionar ante descargas inusuales y excedentes de valor límite.

Beneficios

Con la medición automática de la sonda espectrofotométrica, se obtienen lecturas a tiempo real. El intervalo de medición configurado es de un minuto y se utiliza un sistema de limpieza por aire para mantener limpio el elemento óptico de la sonda. La disponibilidad de los datos obtenidos fue de más de un 99% el año pasado. Gracias a la monitorización on-line y de un sistema de aviso rápido, se han reducido significativamente las tareas del personal y los costes de laboratorios externos.

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